Aunque modelos como el Land Cruiser de Toyota, el Mercedes-Benz CLS y el Audi Q7 se siguen robando con bastante asiduidad, coches de una gama inferior como el Toyota Yaris, el Audi A3 y el Volvo S60 están teniendo un notable éxito entre los ladrones.
Este repunte en los robos de los vehículos de gama media-alta como el Audi A3 y el Volvo S60 se debe a que durante la crisis, estos modelos menos llamativos y de precio más reducido tiene una «mejor salida en el mercado ilegal».
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